La narración de cuentos desde edades tempranas no solo es importante por el hecho de acércales a la literatura sino también por la motivación y los lazos afectivos que un cuento puede generar en ellos.



Debemos de intentar que el momento del cuento, tanto en el colegio como en casa, sea un momento especial, para compartir, sentirse especiales, viajar a otros mundos, planetas, lugares etc.… Pero no solo para los que escuchan el cuento, sino también para el que lo cuenta, ya que el papel del cuenta cuentos es muy importante para mantener la atención y el interés de los alumnos. Es un tiempo en el que los niños dejan su mundo “real” para adentrarse en su mundo fantástico y se entregan completamente a él.



Los cuentos tienen variedad de temas, situaciones, ambientes, personajes… por lo que mediante los cuentos, podemos conseguir que los niños se pongan en situaciones que, a lo mejor, de otra manera no hubiésemos conseguido. Ya que a partir de diferentes cuentos, los niños conocerán diferentes formas de vida según su ambiente y sociedad, las vidas de “cuento de hadas” que pueden, o no, tener los personajes… simplemente ver la vida, en ese momento, desde otros ojos.



Al ponerse en estas diferentes situaciones dependiendo del libro elegido, conseguimos que los niños estimulen su creatividad, conociendo diferentes sentimientos como es el miedo, la intriga que a lo mejor de otra manera no se hubiesen conseguido.

Gianni Rodari, autor. En su libro Gramática de la Fantasía explica, que un niño, al escuchar un cuento no solo intenta comprender la historia, también establece analogías, deducciones, busca entender el significado de las palabras realizando una actividad descifradora. Construye estructuras mentales , proponiéndose relaciones como “yo-los demás” “yo-las cosas” “lo real- lo imaginario”. También mide el tiempo “erase una vez, ahora” y el espacio “lejos- cerca”



La elección del cuento dependerá, en gran medida, del éxito de la actividad. Por lo tanto tenemos que tener en cuenta que el libro sea:

- Adaptado a la edad de los niños.

- No muy largo. Ya que la atención de los niños puede disminuir.

- Ilustraciones claras, marionetas…

- Participativo ya que ayudará a mantener la atención de los alumnos.

- Que nos permita cambiar la entonación de los personajes donde haya partes que se puedan representar.

- Por ultimo, y, para mi, lo más importante, que sea divertido.



El libro elegido no tiene por que tener todas estas características pero, siempre, cuantas más mejor.



El ambiente en la escuela o en casa, también es algo importante a la hora de contar un cuento. Debe ser un ambiente lúdico y acogedor, que facilite la concentración y motive a los niños a pedir más.



El cuento que elegí para realizar en esta actividad fue el de Los Tres Cerditos ya que me parece que es un cuento que todo el mundo se acuerda de la infancia, puedes realizar diferentes tipos de cuentacuentos, ya sea en forma de guiñol, poniendo voces a los diferentes personajes, creando las diferentes casas de los cerditos, en definitiva, de hacer participes a los niños en todo momento del cuento.

Cuando lo realicé a mis compañeros cada vez que lo iba contando se me iban ocurriendo nuevas ideas que integrar a este cuento, algunas de ellas conseguidas por parte de mis compañeros en el momento del “feedback”.

Hay muchas veces que sin quererlo nos ponemos nerviosos y podemos arruinar todo el momento del cuento, la primera vez que lo hice a mis compañeros fueron una de las cosas que me dijeron. Pero a medida que lo iba practicando con diferentes personas, intentando mejorar, la tercera y última vez conseguí hacerlo lo mejor que pude entonando en cada momento preciso, poniendo diferentes voces, fue un momento que hasta disfrute y me di cuenta de lo importante que era poner empeño y dedicación a lo que estamos contando.

La actividad consistía en contarlo a otras dos compañeras/os por lo que no es lo mismo que si lo contamos a 20/30 niños, pero te da una impresión de cómo sería.

Para mejorar mi cuenta cuentos en el momento de realizar las casas de los tres cerditos pararíamos de contar el cuento para que, en grupos, dependiendo de el tipo de casa que quieran construir: paja, madera y ladrillo. No sería del mismo material por la seguridad d los alumnos pero materiales que fuesen parecidos o simplemente en un dibujo.

Otra de las ideas que se nos fueron ocurriendo a lo largo del cuento era la de crear una especie de teatrito con 4 voluntarios para hacer de cerditos y de el lobo creando mascaras o disfraces.



Al finalizar el cuento realizaríamos diferentes preguntas poniéndonos en la situación de los tres cerditos y de el lobo. Por ejemplo: ¿Qué haríais si fueseis el cerdito pequeño? ¿Y el mediano? ¿Y el mayor? ¿Sí fueseis el lobo?



Me ha parecido interesante y motivador realizar este tipo de actividad a mis compañeros ya que aunque a había veces que lo hacíamos a personas que eran más “amigos” al realizarlo con gente que normalmente no te sociabilizas tanto te ayuda a mantener los nervios y a sacar lo mejor de ti, por lo menos en mi caso. El conocer diferentes puntos de vista te ayuda a mejorar ya que a lo mejor lo que no ha notado un compañero lo puede notar otro, darte diferentes ideas por lo que sales con numerosas formas de cómo contar no solo este cuento, sino gran variedad de ellos ya que cada persona tenia o narración con libro o lectura. Por lo que de ahí también podemos sacar cual es la forma que más te ha llamado la atención para contar un cuento a los alumnos.

Por último me ha ayudado a conocer lo importante que es la forma de contar un cuento para los niños, ya que si no lo contamos con ganas los niños no las van a sacar ellos solos y haremos de este momento un “momento más” en vez de “él momento".